En la vida lo único constante es el cambio. Aquello que no cambia está muerto.
Es curioso como los cambios se producen en nuestras vidas. Hay cambios provocados y que nos reconfortan, de otros somos conscientes pero no nos importan, ocasionalmente algunos aparecen de improviso, sin esperarlos, y se van sin dejar huella, también hay de los que nos frustran por ser largamente deseados pero nunca realizados. Sin embargo, los que en realidad nos transforman la vida, es decir los importantes, muchas veces los dejamos ir, pues la poderosa fuerza de la rutina, de lo repetitivo, de lo monótono, nos impide ver que la vida y sus cambios están pasando frente a nosotros y no a través nuestro.
Esa ceguera a los cambios es como un eterno castigo que nos tiene atados a un andén de una estación desde la cual nos despedimos una y otra vez de los mismos trenes y de los mismos pasajeros. El miedo a lo desconocido, a la incertidumbre de la vida y en últimas, al cambio, nos impide tomar esos trenes a pesar de tener el tiquete comprado. La monotonía se ha instalado en nuestras vidas, el cambio toca a la puerta, pero nos da miedo abrir y preferimos ver por la mirilla de la puerta como se alejan una y otra vez los trenes.
Dejan de tocar a la puerta. El tren ya no se ve por la mirilla. Voy a la cocina, me preparo un té, enciendo la televisión, meto comida congelada en el microondas y me siento en mi cómodo sillón. He vuelto a la rutina. El cambio?... no te preocupes, ya volverá a tocar a la puerta, incluso el cambio tiene la costumbre de volver a tocar. Yo, en cambio, tengo la costumbre de no abrir a desconocidos.
6 comentarios:
cuánta razón tienes. y no sólo que no veamos los cambios y los dejemos pasar sino que a menudo aunque los veamos nos da miedo cambiar y preferimos seguir como estamos.
en este blog hay un link a otro blog uno que se llama "quien quiere un mundo mejor". Una vez dentro antes tenian un subtitulo que decía: Una mala, noticia, no solo hay que quererlo hay que intentarlo. (o algo así, estoy citando de memoria)
cuantas veces no hemos dicho que queremos una vida mejor...
fins aviat
omch
Ud. no lo creerá pero yo tengo una historia de cambios inesperados, que no me daba cuenta que me pasaban hasta que tuve que agradecer haber cambiado. La vida tiene algunas vueltas... lo que intento decir es que aunque ud. crea que no le sirve cambiar, si se anima, luego la vida se encargará de explicarle el por qué.(Creer o reventar)
La cita decía: "...lamento comunicarles que quererlo no basta" y lo sigo pensando, aunque ahora que llega Navidad tenía algo más importante que decir!
Gracias Natalia por la aclaración del subtitulo de tu blog
fins aviat
omch
Q CREES??
HASTA LO IMPRIMI y lo comparti con mis compañeros de trabajo
ESTE ES MI CORREO
espacio_psicarroba hotmail.com
hola que lindo tu blog mas este año q entra hay q cambiar uno para q el mundo cambie
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